Cada amanecer llega ilumina cada espacio de este lugar, pero no mi alma siento que mi vida se escapa en cada instante como gotas de agua en las manos lentamente suave dolor se apodera me siento morir despierto me doy cuenta de ello pero no lo puedo evitar, en cada respiro se agota el tiempo, se duerme mi alma en soledad y desesperación, los días son iguales sale el sol muere el sol todo sigue igual, mi corazón llora a escondidas sin libertad para poder continuar, los sueños se pierden en la rutina cada día te sientes morir en soledad tal vez sería lo mejor pero continuas muerto en vida, soñando con un nuevo amanecer que nunca llegara es pensamiento ronda en la cabeza, perdida en la rutina de un día mas no puedes escapar es tu destino continuar así, un castigo que hay que pagar con nuestros sueños e ilusiones, verlos caer como castillos de areno frente a tus ojos deja una herida en el corazón, no es mortal pero un día lo será.
Los ecos de la vida no los puedo escuchar, intento cada día sentirlos deseo poder forjar mi vida, volar a ese horizonte que cada noche mi corazón anhela, en cada suspiro se escapa todo aquellos sueños de libertad, quedo igual que ayer, hoy y mañana perdido en esta vida muriendo cada día un poco más, en qué momento el destino me olvido me soltó de su mano dejándome en compañía de un tiempo que cada día es igual, quiero escapar de esta de esta triste realidad, soy esclavo la desilusión ella cada día ahoga mis pensamientos, será mejor escapar a donde no lo sé debo huir.
Me siento como un ave con las lasa rotas mirando al cielo volar otras almas en libertad, cuantas palabras llegan a mis oídos de libertad pero mueren en el silencio del olvido, profundas son la heridas del alma, donde esta aquella libertad donde esta mi vida se fundió con la soledad y la desilusión, cadenas que aprisionan el corazón. Un precio alto se deberá pagar pero tendré que romperlas, así mi destino sea vagar por las calles de la vida,
Cuando cae la noche ruego al cielo, me enseñe como liberarme de toda esta triste realidad, una luz que me guie, es un canto de sueños y libertad, el miedo esta presente pero eso no evita que deje de luchar así en cada batalla quede herido.
Mañana otro amanecer veremos qué pasa, tal vez todo siga igual no desistiré seguiré intentándolo moriré de pie, no me rendiré, un día mas llega todo sigue igual una lagrima en el alma otra herida un canto al cielo no tengo más, un día llegara otro sol iluminara mi vida, una sonrisa al cielo por la libertad.
El sonido de un piano acompañó mi lectura, el frio se cuela por mi ventana, cierro mis ojos y susurro al oido del hijo de luna: igual que vos me he perdido en la soledad, la desesperación, esa misma a quien la vida a veces arrastra como fardo.
ResponderEliminar(Silencio. Las notas de Beethoven merecen silencio aun de éstas palabras escritas que no emiten eco.)
A veces miro hacia el cielo... ya no tengo preguntas, tan solo un corto suspiro suspende mi mirada y me recuerda que debo continuar mi camino.
Otras tantas veces pienso en Wilde y recuerdo que la vida es demasiado corta para tomarserla enserio, a veces la bulla de mi ciudad me recuerda que hay algo allá afuera más fuerte que todo este dolor y me dejo llevar.
Cada noche me entrego a alguno de mis significantes, sus libros salvan mi vida y el dolor vuelve cuando cierro la caratula y recuerdo que la vida no es como los libors.
Esta fria noche te pido en silencio que desde donde estes me regales una sonrisa, que escuches una canción que te sacuda el alma y que como dice alguna canción: "...la ciudad te esta esperando, afuera llueven madreselvas, se acerca el verano, qué va a ser de nosotros si decides no venir conmigo, sal a desafiar al alba y sus asesinos..."