Ella un ángel caído que llego acariciar mi infierno, sus besos fríos como hielo que nacen en la oscuridad de un corazón roto, eres un mundo diferente bello, frio, dulce, cruel, en un instante puedes destruir la luz que me guía en esta tormenta, tus labios pronuncian dulces mentiras que alimentan el alma, una sonrisa se dibuja con las falsas ilusiones, cada beso es como una gota de veneno que recorre mis venas.
Eres un hermoso demonio, que salió de mi soledad, somos un pacto de silencio un beso en el olvido, una caricia al viento, una brisa que se escapa como gotas de agua entre las manos, en la noches eres pensamientos que vagan en la oscuridad de mi habitación, dueles en cada pensamiento, los suspiros son golpes al corazón.
Ángel caído de mis noches eternas e infernales, vagas en mis deseos de luna llena, está presente en mis sufrimientos como herida, tu corazón esta oculto en la ilusión de un niño perdido en un mundo enfermo, tus caricias son espinas con dulce veneno, que nublan la mirada, con cada paso alejan los sentimientos de este corazón inútil que muere en cada beso tuyo.
Una mirada tuya es suficiente para perderse en la profundidad de tu perdición, tu piel es un océano de furia, no existe puerto alguno quien se atreve a navegar en él, su destino perecer en tu infierno de soledad y abandono, eres el beso de una poesía de media noche, morirá cuando el sol bese el cielo.
Estoy aquí perdido en tu camino vagando sin destino soñando con un beso mas, a cada paso que doy hacia ti se borran las huellas tú no estás frente a mí, miro atrás no encuentro mi pasado, escribo con llanto mis letras emanan de un corazón, perdido en la ilusión de tus besos, me quedo vagando en el eco de tu voz, no soy ni un instante en tu vida.
Se bien que no estoy en tu recuerdo, no soy pasado de una noche solitaria que llega a tu mente en ese instante cuando la nostalgia aparezca junto a la soledad, tu amor fue una apuesta del olvido y la soledad, mis suspiros se pierden en el tiempo, sueño fugaz de mil noches sin amanecer, una mentira que alegra el corazón,
Ángel caído cada noche ruego, mis lágrimas una ofrenda de dolor, muero lentamente en tu recuerdo, en la soledad de mi habitación ruego por un beso más así este lleno de veneno, tal vez esa noche muera este inútil corazón.
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